El periodismo en Venezuela está en horas bajas. Hoy, una caravana de colegas venezolanos desplegaron una pancarta en diez idiomas con la leyenda “Libertad de expresión, S.O.S.”, en repudio a la decisión del presidente Hugo Chávez de no renovar el permiso de transmisión a la emisora Radio Caracas Televisión.
Los manifestantes, que cargaron “la pancarta más grande de Latinoamérica”- tiene un kilómetro de extensión y pesa 180 kilos-, marcharon hacia las sedes de
la Unión Europea y de
la Organización de Estados Americanos, adonde entregaron un documento en el que expresan su apoyo a favor de la renovación de la licencia de RCTV.
Algunas declaraciones que pueden recogerse, sobre todo en medios internacionales y bajo anonimato, muestran a periodistas que, de acuerdo o no con la política de RCTV, ven en la decisión de Hugo Chávez una injerencia extrema en los medios de comunicación, que algunos colegas del medio audiovisual calificaron de “autoritaria y temeraria”.
Recuerdo a dos amigos- desde acá, saludos a Gabriela y a Juan Diego- que hice en Barcelona, de diferentes círculos, ambos periodistas, que desencantados con la forma de ejercer la profesión en Venezuela- allá por el año 2002- decidieron salir del país para poder ejercer su profesión con libertad y probar suerte en España.
Los dos siguen allá, y los dos, al ser preguntados pro la vida en
la Venezuela de Chávez, decían que pese a considerarse fervientes demócratas habían apoyado el aire fresco que traía el golpe chavista y su consecuente toma del poder años más tarde, en 1998.
Pero más temprano que tarde, nos contaban, se desencantaron con la falta de libertad de expresión, con el pensamiento único, y con la falta de progreso de una Venezuela que sentada en petrodólares le quita los argumentos a cualquiera que quiera hacerle frente a Chávez.
Para ser justos, también mostraron siempre su desencanto con todo lo que precedió a Don Huguito, y con la oposición al mandatario venezolano. “Con esta oposición ¿qué querés?”, repetían.
Desde el Sindicato de Trabajadores de Prensa, uno de sus voceros dijo que se contó con la participación de colegas de todos los medios y todas sus ramas.
Desde el Gobierno, el ministro de Comunicación, William Lara, apeló al pueblo, igual que su jefe, y señaló que "habrá una fiesta popular en todo el país" cuando el próximo domingo la estatal recién creada Televisora Venezolana Social (TVES) inicie sus trasmisiones a través de la frecuencia que desde hace 53 años utiliza la privada Radio Caracas Televisión (RCTV).
Tachado por Chávez de “verdadero dictadorzuelo”- qué pasión que siente el presi por inventar palabras-, Marciel Granier, presidente del grupo empresarial al que pertenece RCVT, dijo que puso toda su confianza en que el Supremo evite que el día 27 su emisora "salga del aire", o "la rectificación del presidente, porque es de sabios rectificar y (...) solo los estúpidos no cambian de parecer".
En París, la organización Reporteros sin Fronteras (RSF), calificada de “mercenaria” por el gobierno venezolano, lamentó hoy que el Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela haya desestimado una demanda de RCTV contra la retirada de su licencia de emisión. En realidad el Supremo no desestimó ninguna demanda sino un amparo, y dejó en manos de la Sala Político Administrativa la decisión sobre si RCTV podrá seguir usando la frecuencia estatal.
Curiosamente, el socialismo del Siglo XXI eligió el 28 de mayo para poner sobre ruedas el nuevo canal estatal.
Con información de El País, El Mundo y El Tiempo.
